BOBST se ha unido a la iniciativa de Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi), reflejando su compromiso con una acción climática urgente

La SBTi es una asociación entre el CDP, el Pacto Mundial de las Naciones Unidas, el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), y permite a las empresas establecer objetivos ambiciosos de reducción de emisiones de acuerdo con la ciencia climática más reciente. 

Para BOBST, este es el siguiente paso en un viaje hacia una mayor sostenibilidad, que la empresa ha establecido como uno de los cuatro pilares fundamentales de su estrategia y visión de la industria del embalaje, junto con la automatización, la digitalización y la conectividad. Tras adherirse a la iniciativa, BOBST está ahora en proceso de formalizar los objetivos de la empresa para alinearlos con las definiciones y criterios de SBTi y espera que se aprueben el próximo año. 

Más de 4.000 empresas colaboran con el SBTi para reducir sus emisiones de acuerdo con la ciencia climática. Los firmantes deben establecer objetivos ambiciosos de reducción de carbono, que se evalúan y verifican de forma independiente, y se ajustan a los últimos avances científicos y a las recomendaciones del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). Además, las empresas deben divulgar los resultados anualmente. 

“Con el reciente informe del IPCC sobre el clima descrito como 'un código rojo para la humanidad’, es responsabilidad moral de todas las empresas comprometerse a tomar medidas urgentes sobre el clima”, dijo Gabriel Migy, Director de Sostenibilidad Corporativa. “Como proveedor mundial de soluciones de envasado, sabemos que los componentes que compramos, las instalaciones industriales que gestionamos y los equipos que producimos consumen inevitablemente energía y generan emisiones. Unirnos al SBTi nos ayudará a colaborar con nuestros proveedores y clientes y a establecer objetivos para reducir nuestras emisiones a largo plazo en toda la cadena de valor con enfoques pragmáticos y científicos.”

Cabe destacar que las emisiones de carbono generadas por los centros de producción de BOBST representan sólo una fracción de su huella de carbono global. Alrededor del 90% de las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a las actividades de BOBST se producen en las fases posteriores a la cadena de valor, a través del uso de los productos vendidos. Esto pone de manifiesto la necesidad de trabajar en colaboración y de que BOBST desempeñe un papel clave en el diseño, el mantenimiento y el funcionamiento de sus máquinas para reducir su impacto medioambiental durante su vida útil, conjuntamente con los clientes. 

“Sabemos que el cambio real sólo es posible a través de la colaboración y de que todo el mundo avance en la misma dirección, por lo que iniciativas como la SBTi son muy esenciales”, dijo Gabriel Migy. “Esperamos alinearnos con todas las demás partes interesadas que están comprometidas con los enfoques basados en la ciencia para la acción climática.”

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